Nos encontramos
en un escenario tan complejo que resultaría difícil predecir un resultado
atendiendo a un razonamiento lógico.
Por una parte,
quien reclama para sí la exclusiva legitimidad de gobernar para resolver la
grave situación en que nos encontramos es quien menos representa la posibilidad
de abordar con garantías los principales problemas que nos acucian:
- La articulación del estado plural sin tensiones separatistas.
- La regeneración democrática de un estado expuesto a la corrupción de las instituciones o desde las instituciones.
- La salida de la crisis económica con un reparto equitativo del coste social.
Por otra parte,
y de modo paradójico, parece que de no ser así –que se facilite que gobierne el
PP-, estamos abocados a unas terceras elecciones que serían de todo punto
inadmisibles a juicio de las partes implicadas, los partidos políticos.
Mientras tanto,
la sociedad española, aunque expectante, parece resignarse a cualquier
circunstancia mediante la autoaplicación
del Teorema de la incompletitud[1].
-
Se resigna a una “imposibilidad” de demostrar
que el aspirante a gobernar está en el meollo de la corrupción y por lo tanto
inhabilitado para hacerlo.
- Se resigna a una “imposibilidad” de demostrar
que una política económica menos especulativa y más productiva es posible y,
sobre todo, una política económica menos cicatera y empobrecedora para el común de la ciudadanía.
-
Se resigna a una “imposibilidad” de demostrar
que un gobierno de progreso sería una opción factible, a pesar de las supuestas
incompatibilidades entre Podemos y Ciudadanos.
Por todo ello, a
pesar del relajo de las vacaciones, me encuentro con un “más” de desasosiego,
un “menos” de resignación y, en definitiva, plagado de incertidumbres, como
todos.
[1]
El “Teorema de la incompletitud” fue enunciado por el matemático Frank Gödel en
1931. Su enunciado básico consistía en afirmar que toda proposición no
demostrada puede, en principio, ser indemostrable. Pido disculpas a los matemáticos si entienden que hago un uso interesado o equivocado de conceptos matemáticos.